martes, 23 de junio de 2015

LA TÍA, LA PRIMA, LA CHINA

Recién aterrizado en la calurosa Bucarest y camino a la acogedora finca de mi comadre balcánica, me pregunta Linda si estoy al tanto del “chisme del momento”. Pienso en alguna pataleta o incompatibilidad de caracteres de esas que matizan el día a día de nuestro clan intercontinental.

¿¿¿Vargas Llosa está con Isabel Preysler???

Simplemente no lo puedo creer. Acudo prontissimo a mi esmarfon para despejar dudas, ingreso los nombres y, efectivamente, hay cuantiosas noticias al respecto – a ambos lados del Atlántico.

Cada transición de un matrimonio de Mario al otro, no ha estado libre de levantar polvareda: después de su legendaria unión de 9 años con la "tía" Julia - que de hecho era tía de su futura segunda esposa Patricia - y 50 sólidos años al lado de su prima de naricita respingada y carácter indomable, Mario declara a la prensa estar separado.

Las fotos lo muestran al lado de una guapísima y cómplice reina de corazones, apenas cinco años menor y tres matrimonios más rica que Patricia Llosa Urquidi. Tal es su presunta sorpresa, que luego de aparecer la foto del escándalo en ¡HOLA!, la sobrina de Julia emite un comunicado comme si rien n'était - como si acá no pasara nada más que 50 años de matrimonio recién festejados.

Ironía del destino que, después de toda una vida al lado de Mario, la primita juguetona sufra en carne propia algo similar a lo que pasó con su tía Julia Urquidi Illanes (1926 - 2010) en el París de los años sesenta. Patricia, sobrina de Julita y prima de Mario, se instaló en el departamento/buhardilla de ambos en París y a los seis meses arrasó con el matrimonio de sus dos parientes.

Sorprende a los allegados, amigos y metiches que esta vez no haya un vínculo de parentesco – consanguíneo o político – entre MVLL y su flamante y exótica pareja.

DEL DIVO AL NOBLE - DEL COCO AL NOBEL

Dicen que la revista ¡HOLA! es el álbum de familia de Isabel Preysler: no hay un solo número sin una foto suya o de algún miembro de su clan. Por otro lado, es altamente improbable que la reina de las revistas glam publique una foto tan comprometedora sin la venia de la señora Preysler.

Méritos no le faltan a la espigada filipina que en menos de cinco años viviendo en la península, ya forma parte indiscutida del star system mediático. Su primer marido: un joven cantante que durante su matrimonio pasa a convertirse en el artista español más famoso del mundo, Julio Iglesias. Con el segundo, el aristócrata Carlos Falcó, se convierte en marquesa y tiene una hija muy guapa. Aun casada con el marqués, se enamora de Miguel Boyer, un brillante economista del equipo de Felipe González que deja la política para estar junto con su amor furtivo y formalizar la relación.

En esos años, recibe de ¡HOLA! la misión de entrevistar a MVLL en San Luis, Misuri. Dicen las malas lenguas que el flechazo fue inmediato... pero la ejecución tuvo que esperar hasta que ambos estuvieran libres. En los casi treinta años entre 1986 (año de la entrevista) y 2015 (año del destape), las parejas Boyer-Preysler y Vargas-Llosa se visitaban y compartían frecuentemente.

Qué proféticas suenan las palabras de Mábel Galaz (EL PAIS luego de la muerte de Boyer):

"Preysler se reinventará, nadie lo duda. Después de un periodo de luto, la reina del corazón volverá a la vida pública, a las portadas. Tras tres matrimonios, regresará ya no como señora de Iglesias, Falcó o Boyer. Será otra."

¿Será acaso la nueva marquesa de VArgas Llosa?
Hoy, viuda ella y separado él, ya veremos cómo sigue esta historia digna de la pluma del escribidor Pedro Camacho.

sábado, 28 de febrero de 2015

¡DE SEGUNDO, AL PETISERO!

Mi etéreo amigo salteño firmó uno de sus últimos correos electrónicos con tres palabras: Javier el petisero. Me dejó pensando... el petisero... ¿no será que a estas alturas de su sabrosa cuarentena don Javier descubrió que le gustan los bajitos? No podía quedarme con la intriga y se lo pregunté a vuelta de ciberepístola: oye, Javi, ¿qué onda con los petisos?

Gracias a su pronta respuesta, aprendí que "petisos" son una raza de caballos y petiseros los respectivos muchachos que los cuidan en las estancias de la pampa argentina...y que la alusión estaba motivada por una telecomedia rioplatense donde Segundo, un distinguido cuarentón, jugador de polo y muy gay de clóset, vive un romance con su petisero Tony, muchacho de campo, tímido pero sincero y muuuy potro, tanto que hasta la cuñada de Segundo lo anda acosando todo el tiempo.

La historia es complicada porque el polista está casado con la temperamental Miranda y -al cabo de los primeros cien capítulos- a cada uno de los escasos besos cómplices de los enamorados siguen semanas de distanciamiento y complicación. Sin embargo, desde el primer capítulo está claro que Miranda volverá al lado del gran amor de su juventud y entonces Segundo quedará libre para Tony.

Eso digo yo, pero vamos a ver si los libretistas lo ven tan fácil como yo.

sábado, 31 de enero de 2015

DESPROPÓSITOS 2015

Último día del primer mes del año... tonificantes tres grados centígrados, un par de horas de sol, luego aguanieve, oscuridad, pereza, sueño.

Pienso en el propósito no consumado de subir un artículo cada semana, como Jaime, como Silvia –hasta que me doy cuenta de que ella también ha bajado el ritmo de producción de un tiempo a esta parte. Modesto consuelo para un escritorzuelo. Llega el fin de mes y acá estoy, aporreando el teclado, cuando faltan tan solo dos horas para la medianoche.

Pienso en “mi gran novela”, esa saga familiar que abarca todo el siglo XX. Tengo una lista de personajes en borrador desde hace poco tiempo, ¿acaso unos veinte años? Pero en lo que va del año no ha pasado nada.

Pienso en el proyecto por el que estoy luchando desde setiembre pasado: una lectura escénica de Sarah, Fogo y Hielo en el Instituto Cervantes de mi ciudad. Conseguir la fecha fue un parto con fórceps: se tardaron tres meses en confirmarla. En cambio, colaborar con una actriz con las aptitudes y experiencia de Lenka, eso sí que ha sido un enriquecimiento. Faltan cinco días para el evento y estamos listos, casi listos.

Pienso en esos intrusos kilogramos de más, legado adiposo de unas fiestas navideñas y de año nuevo muy golosas y sabrosas. Muchas sopitas de verduras y kilómetros de caminatas después, llego a la conclusión de que los invasores se sienten tan a gusto en mi intercontinental humanidad que por qué no autorizar su residencia permanente.

Pienso en los avances que vi hace unos días de la segunda parte de BEST EXOTIC MARIGOLD HOTEL, deliciosa comedia británica sobre un grupo de jubilados que por diferentes motivos deciden mudarse a la India. ¿Qué más se podría esperar contando con un elenco encabezado por las geniales Maggie Smith y Judy Dench?

Pienso qué maravilla que ya terminó el primer semestre del año escolar. No es que no me sienta a gusto con la docencia, pero la verdad es que hay ciertos grupos (como los chicos de 13 a 14 años) que me sacan canas verdes y me pregunto si no habría maneras menos azarosas de pagar las cuentas del mes.

Pienso –curiosamente– en el viernes 3 de julio, último día de clases y antevíspera de mi ansiada visita anual a Colombia y luego Perú.

Se acerca la medianoche y no he subido aún el post... ¡Permiso!